valiente ocurrencia

Yo es cobarde y plano. Casi Yo es mucho más valiente y de vez en cuando se rasca la coronilla. Bienvenidos a las ocurrencias de Casi Yo.

Nombre:

viernes, marzo 18, 2011

Empate

A todos los que tembláis pensando

en el futuro ocaso de vuestra belleza,

en la finitud de vuestra tersura,

tengo algo de que deciros:


Joderos.


No se puede perder lo que no se tiene.

Yo nunca fui guapo y por eso comprendo

que las canas que proliferan en mi cabeza

no son otra cosa que pelos blancos.


A todos los que sufrís mirando

la prensa económica y la opacidad del horizonte,

viendo como vuestro dinero se tambalea,

tengo un consejo que daros:


Joderos.


No puedes conservar lo que no es tuyo.

Yo he sido siempre pobre y he comprendido

que mantenerse vivo y digno en la Unión Europea

es más o menos fácil. Injustamente sencillo.


A todos los que tenéis el corazón en un puño

temiendo el final de vuestro amor, o mejor dicho,

de ese ejercicio de ego que consiste en ser amado,

tengo un mensaje que regalaros:


Joderos.


Si alguien te quiere es porque así lo ha elegido

y da igual lo que tú hagas. A mí me quieren mucho,

siempre me han querido mucho, sin yo merecerlo,

y por eso sé que los corazones se unen pero no se funden.


Nadie en este mundo será tan bueno siendo tú como tú,

y tu obligación no es ser guapo, ni rico, ni siquiera ser querido.

Que te quieran es bueno, sobre todo por una razón:

te anima a seguir vivo hasta que te mueras.

lunes, marzo 14, 2011

Campeón del mundo

He dado cuatro vueltas al Mundo
solo este mes,
he dejado con la boca abierta a los siete sabios,
me han elevado a un Olimpo propio de un Everest,
he tenido mil amantes de una noche
y algunas era suculentas obras de ingeniería,
he bebido lo que ataría de envidia
al emperador de las abejas.

He vivido jornadas heroicas,
verdaderos homenajes a mí mismo,
pero todos los días ha habido un momento,
unos minutos desnudos
en los que he pensado qué bonito sería
estar solo contigo, si acaso
con una cabra, unas gallinas y poco más,
como un hombre feliz,
de esos que nunca se preguntan nada.

He ganado cuatro premios solo esta semana,
uno al más guapo, otro al más rico,
uno al más ocurrente y otro al más gilipollas.
He vivido tanto que lo he hecho todo
–al menos todo lo malo–
y siendo aún medio joven tengo una biografía
para contar en tres tomos.

Pero no puedo evitar que cada día
tenga un momento, un minuto amargo,
en el que piense qué fácil sería
olvidar todo el rock and roll del mundo
y vivir eternamente en pijama,
silbando esas melodías que tú te inventas
y que son la única nana que he conocido en mi vida.

martes, marzo 08, 2011

Homo patiens

Por muy listo que seas
no dejarás de equivocarte.
Por mucho que medites,
no encontrarás la paz.
Por mucho que vivas,
nunca serás inmortal.
Por más kantiano que seas
no dejarás de ser injusto,
y aunque te cuides con rabia
la edad acabará humillándote.

Por mucho que midas tus palabras
siempre hablarás demasiado,
y por más que endurezcas tu corazón,
no evitarás el llanto.

Llorarás cien veces tu peso,
ése es el precio de ser humano.
Siempre estarás solo en la cumbre
de la cadena evolutiva,
igual que los miles de semejantes
que te acompañan.

Y sin embargo,
qué bello es sentirse tan inacabado,
saber que eres la antesala
de la perfección. El único en saber
–aparte de Dios–
que el infinito existe.

martes, marzo 01, 2011

Haz lo que debes

Haz lo que debes.

Lávate detrás de las orejas,
ayuda a tus semejantes,
no fumes.

Haz lo que debes.

No mientas nunca,
ni siquiera en defensa propia,
sé honesto y leal,
haz deporte,
come poco,
no bebas,
no utilices tu sexo en vano.

Haz lo que debes.

Camina recto,
mantén la cabeza alta
aunque lluevan piedras,
y nunca hagas algo
de lo que puedas avergonzarte.

Haz lo que debes.

Devuelve lo que no es tuyo
y comparte lo que tienes.
Aprende,
nunca dejarás de hacerlo.
Llega a viejo
y déjate la pensión pagada.

Haz lo que debes.

Honra a tu padre y a tu madre
sin preguntarte cómo son.
Ten hijos,
No bebas cosas frías en invierno,
no mates, no robes,
no desaproveches la ocasión
de socorrer a ciegos y ancianos.

Haz lo que debes.

No seas esclavo de los objetos
ni de los placeres, y mucho menos
de las personas.
Medita, reza, eleva tu espíritu.
Lee, escribe, haz crucigramas.

Duerme ocho horas diarias,
no piques entre comidas,
sé siempre fiel a tus principios
y que tus valores sean siempre
beneficiosos para la humanidad.

Haz lo que debes.
Y después,
cuéntanos cómo lo has hecho.


anuncios evisos contador de visitas
contador de visitas